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En la comarca de la Marina Baja, en Alicante, entre campos de cultivo, valles y montañas, encontramos un rinconcito que tiene mucho de mallorquín, casi tanto como de valenciano. Se trata de la población de Tárbena (o Tàrbena).
Tárbena, en Alicante
Para ir a Tárbena, hay que ir a conciencia, puesto que no viene de paso de ninguna ruta turística. E ir supone sentirse cerca de Mallorca. El uso de la lengua valenciana con acento balear, la utilización de “sa” en lugar de “la”, o la elaboración de sobrasada casera mallorquina y ensaimadas son alguna de las trampas que sus habitantes utilizan para hacernos creer que llegamos a las Baleares, por no hablar de todos los apellidos procedentes de Mallorca que sus habitantes lucen en sus documentos de identidad.
Por qué Tárbena tiene tanto de Mallorca
Y nos preguntaremos, ¿qué sucede en Tárbena, que todo nos recuerda a Mallorca? Pues que en 1609 con la expulsión de los moriscos de la Península Ibérica, Tárbena, un pueblo de origen árabe, se vio prácticamente despoblado y sus cultivos inutilizados, así que se acudió a Mallorca a buscar “pagesos” que repoblaran estas fértiles tierras. Acudieron desde Santa Margalida bastantes familias, y todavía permanecen sus descendientes en Alicante, dejando sus rasgos culturales en este territorio.
El encanto de este pueblo es único. Su ubicación inmejorable. En el interior, un tanto alejado de la sobreexplotación que se vive en algunos lugares de costa, pero a la vez accesible a ellos, te invitamos a acercarte a este rincón de Alicante, en plena naturaleza. Te dejará un sabor de boca a autenticidad y, como no podía ser de otra forma, ¡a sobrasada!
